¿Qué es el tarot?

El tarot es un antiguo sistema de adivinación que ha capturado la atención y el interés de personas de todo el mundo. Aunque suele asociarse con la predicción del futuro, el tarot es mucho más que eso. En este post, exploraremos cómo funciona el tarot, desde la creación de las cartas hasta el proceso de lectura y las diferentes interpretaciones que se pueden obtener. No pretende ser algo exhaustivo sino una mera introducción.

El origen exacto del tarot no está claro, ya que hay diversas teorías al respecto. Sin embargo, muchos estudiosos creen que se desarrolló en Europa en la época medieval. Algunas teorías sugieren que el tarot se originó en el antiguo Egipto y luego se introdujo en Europa a través de los gitanos. Otras teorías afirman que su origen se remonta a la antigua civilización de los celtas. Estas dos últimas parecen más bien una invención de la cultura popular. La evidencia histórica apunta a que su origen data de la Italia medieval.

Precisamente en esa época las cartas del tarot eran utilizadas como un juego de naipes, pero a lo largo del tiempo se fueron vinculando con prácticas de adivinación y esoterismo. Se cree que el tarot se popularizó durante el Renacimiento, cuando las cartas comenzaron a ser utilizadas como herramientas para la interpretación de eventos futuros y el autoconocimiento.

Hoy en día, el tarot se utiliza principalmente como un medio para obtener información y orientación sobre diferentes aspectos de la vida, así como para la autoexploración y el desarrollo personal. Es una práctica común entre los tarotistas realizar lecturas de cartas para brindar consejos y respuestas a las preguntas de las personas.

El tarot se compone de un mazo de 78 cartas, divididas en dos grupos principales: los Arcanos Mayores y los Arcanos Menores. Los Arcanos Mayores representan situaciones y eventos importantes en la vida de una persona, mientras que los Arcanos Menores se enfocan en aspectos más cotidianos y detallados. Cualquier baraja de cartas que tenga esta estructura, respetando el orden y la equivalencia en el significado de cada carta (con variantes respecto a lo que puede suscitar en el tarotista) puede ser considerado un tarot. Cualquier otra configuración de cartas, se denomina normalmente oráculo.

La creación de las cartas de tarot varía dependiendo del artista y la tradición en la que se basa. Cada carta cuenta con su propio simbolismo y significado, lo que las convierte en poderosas herramientas para la introspección y la reflexión personal. Algunos mazos de tarot son más tradicionales, como el mazo de Marsella, mientras que otros tienen temáticas más contemporáneas y creativas. Hay muchos mazos de tarot para nada ortodoxos inspirados en la cultura pop, o que beben de diferentes culturas o subculturas.

Para realizar una lectura de tarot, el lector baraja el mazo y el consultante elige una serie de cartas al azar. La posición de las cartas seleccionadas, así como las cartas en sí, son evaluadas y analizadas por el lector para proporcionar una interpretación significativa. Esto se hace teniendo en cuenta la relación entre las cartas, así como las imágenes y los símbolos presentes en ellas. Esto es a grandes rasgos una lectura, pero hay tantos modos de leer como tarotistas. Normalmente para empezar se enseñan lecturas en las que cada posición de cada carta tiene un significado concreto. También hay tiradas libres en las que no hay un significado prediseñado para cada posición.

Cada carta de tarot tiene un significado general, pero también puede tener significados más específicos dependiendo del contexto y la pregunta formulada. Algunas cartas pueden indicar un cambio repentino, mientras que otras pueden indicar oportunidades o desafíos. La interpretación exacta puede variar según el lector y su enfoque personal.

Es importante tener en cuenta que el tarot no predice el futuro de una manera concreta y absoluta. En cambio, ofrece perspectivas y consejos para ayudar a las personas a tomar decisiones informadas y evaluar diferentes aspectos de su vida. El tarot puede ofrecer claridad en situaciones confusas, ayudar a descubrir patrones ocultos y brindar orientación en momentos de necesidad.

Aunque cualquiera puede aprender a leer las cartas de tarot, es importante tener en cuenta que se necesita práctica y experiencia para llegar a ser un lector competente. Además, el estado mental y emocional del lector también puede influir en la interpretación de las cartas. La intuición y la conexión con el consultante son elementos clave en el proceso de lectura del tarot.

En resumen, el tarot es un sistema de adivinación que utiliza un mazo de cartas con significados simbólicos para brindar orientación y perspectiva. Aunque no predice el futuro de manera absoluta, el tarot puede ayudar a las personas a explorar diferentes aspectos de su vida y tomar decisiones informadas. La práctica y la experiencia son fundamentales para convertirse en un lector competente, mientras que la intuición y la conexión con el consultante son factores importantes durante el proceso de lectura. El tarot ofrece una herramienta poderosa para adentrarse en el mundo de la introspección y la espiritualidad.